MOCIÓN EMERGENCIA CLIMÁTICA AYUNTAMIENTO ESTELLA-LIZARRA



MOCIÓN DE EMERGENCIA CLIMÁTICA DEL AYUNTAMIENTO DE ESTELLA-LIZARRA
Las organizaciones ………………………………………... ​que integran la Alianza por la Emergencia Climática de Lizarra​, y las personas físicas cuya relación se adjunta en ANEXO, y en representación suya …………………………………., con DNI n.º ……………., se dirigen al Pleno del Ayuntamiento de Estella-Lizarra y a los grupos políticos que  están representados para instarlos a reconocer el estado de emergencia climática en el cual nos encontramos, mediante la aprobación de la presente propuesta de MOCIÓN  y la adopción de las medidas que se  deriven.
EL PLENO DEL AYUNTAMIENTO DE ESTELLA-LIZARRA APRUEBA LA SIGUIENTE
DECLARACIÓN DE EMERGENCIA CLIMÁTICA
El Ayuntamiento de Estella-Lizarra reconoce que el planeta, así como los seres vivos y los ecosistemas, se encuentran en grave peligro. Prueba de esto son los recientes informes sobre el estado de la biodiversidad de la ​Intergovernmental Science-Policy Platform Biodiversity and Ecosystem Services (IPBES) y del calentamiento global de 1,5 °C del ​Intergovernmental Panel on Climate Change (IPCC), los cuales alertan de un rumbo que conduce a la extinción de una gran parte de los ecosistemas terrestres. Un millón de especies están amenazadas por la actividad humana. También se está al límite del punto de no retorno en cuanto al cambio climático. No responder ante la crisis ecológica y civilitzatòria supondría la muerte de millones de personas, además de la extinción irreemplazable de especies imprescindibles para la vida en la Tierra, atendidas las complejas interrelaciones ecosistémicas.
En este sentido, aceptamos como hechos verdaderos la existencia de la crisis climática y la gravedad de la situación. Admitir las evidencias científicas y también el necesario proceso de reducción de las emisiones que se propone es la única manera de asegurar un futuro para el municipio. La ciudadanía tiene que entender la urgencia y la irreversibilidad de esta lucha. El Ayuntamiento de Estella-Lizarra puede y debe tener un papel clave en la formación, la educación y la información sobre el necesario freno a las emisiones de gases de efecto invernadero ​(GEI)​. Además, es vital que lleve a cabo una adaptación a las consecuencias del incremento de la temperatura global.
Declarar la emergencia climática requiere la asunción de compromisos políticos reales y vinculantes, mucho más ambiciosos que los actuales, y la asignación de los recursos necesarios para hacer frente a esta crisis. Es imprescindible aplicar una hoja de ruta vinculante, capaz de garantizar las necesarias reducciones anuales de gases de efecto invernadero, el abandono de los combustibles fósiles, la opción por una energía 100% renovable y la reducción a cero de las emisiones netas de carbono, cuanto antes mejor, de manera urgente y prioritaria, de acuerdo con las indicaciones del informe del IPCC para limitar el aumento de las temperaturas globales a un máximo de 1,5 °C. El estado de emergencia implica redirigir todos los recursos de los ayuntamientos para encarar la crisis climática y los problemas asociados que comporta.
Entre estos problemas no es una cuestión menor la necesidad de planificar un escenario económico de post-crecimiento. La vida económica del municipio no puede fundamentarse en un crecimiento económico ilimitado que continúe con la depredación de recursos limitados en un planeta finito y en un incremento constante del consumo de energía que compromete gravemente el futuro de la civilización humana y la vida en el planeta.
La declaración de emergencia climática supone comenzar un proceso de educación, formación y concienciación de toda la población y hacer ver la realidad de la crisis ecológica y el enorme cambio que es necesario para frenar la emergencia climática. Ante esta situación, el Ayuntamiento se compromete a iniciar el mencionado proceso de transformación social y asegurar la plena consecución de los siguientes objetivos generales.
El AYUNTAMIENTO DE ESTELLA-LIZARRA SE COMPROMETE A:
1. Establecer los compromisos políticos, las normativas y los recursos necesarios para garantizar la reducción de los ​GEI (gases de efecto invernadero), con el objetivo de llegar al balance  de emisiones netas cero no más tarde de 2040, si puede ser antes de 2035, ​y la reducción en 2030 del 65% de emisiones de estos gases respecto a las de 1990; así como para detener la pérdida de la biodiversidad y restaurar los ecosistemas, como única respuesta posible para evitar el colapso de todos los sistemas naturales, incluido el humano.
2.   La ordenación y gestión del territorio es una de las principales competencias municipales. En este sentido, el Ayuntamiento se compromete a revisar y actualizar su planeamiento urbanístico con criterios de sostenibilidad ambiental y reducción de los consumos de energía y territorio.
Por eso, el Ayuntamiento se compromete a no autorizar más suelo urbanizable y desclasificar todo el suelo urbanizable que no esté ejecutado o consolidado; a no autorizar nuevos usos residenciales en el suelo rústico que no estén vinculados a la actividad agrícola, ganadera o de gestión forestal; a evitar la zonificación de actividades para reducir la demanda y las necesidades de movilidad al máximo; a no prever el despliegue de nuevas infraestructuras y servicios que supongan costes energéticos y de mantenimiento que puedan comprometer los objetivos de esta declaración; a no permitir nuevas infraestructuras de comunicación que permitan un incremento del uso del automóvil privado; a preservar el carácter de reserva natural, forestal, agrícola o ganadero del suelo rústico, no permitiendo otros usos, incluido el industrial, el recreativo y el turístico; y a no construir nuevas captaciones de agua potable ni canalizaciones que comprometan todavía más gravemente la gestión de los acuíferos.
3. Abandonar el uso de los combustibles fósiles y usar fuentes de energía 100% renovables de manera urgente y prioritaria. Por eso, los gobiernos municipales tienen que estudiar cómo conseguir este objetivo y proponer los planes de actuación necesarios para: frenar nuevas infraestructuras asociadas al uso de combustibles fósiles; conseguir el pleno autoconsumo eléctrico 100% renovable y una movilidad sostenible cuanto antes mejor; crear espacios peatonales; fomentar el uso de la bicicleta y otros medios de transporte no contaminantes ​y el transporte público colectivo​; reducir la demanda de energía hasta niveles de consumo sostenibles; promover el aumento de la eficiencia energética y de las instalaciones renovables; crear espacios educativos e informar a la población de la emergencia climática; lograr una política de residuos cero; evitar que la municipalidad trabaje con bancos que financian proyectos basados en el uso de combustibles fósiles, etc. El Ayuntamiento se compromete a gestionar de esta manera los edificios y espacios públicos municipales, a adaptar con estos objetivos el planeamiento urbanístico municipa​l El Ayuntamiento tiene que gestionar con cuidado los espacios públicos municipales y aplicar una política de ordenación del territorio que tenga un cuidado activo del suelo rústico,  evite la contaminación y la degradación y procure la recuperación de la tierra fértil, el mantenimiento y recuperación de la superficie forestal y los pastos y el freno de la erosión.

En concreto, el ayuntamiento:
Desarrollará el District Heating Calentamiento del Barrio proyectado para la calle La Rúa con el que calentará con biomasa obtenida de sus propios aprovechamientos forestales, los edificios públicos que se encuentran en dicha zona (Albergue municipal, museo del Carlismo, Casa de Cultura, antiguo ayuntamiento y museo Gustavo de Maeztu).
Estudiará mediante la realización de un informe la posibilidad de convertirse en distribuidora energética municipal para explorar la posibilidad de ofrecer a la vecindad de la calle La Rúa (y posteriormente otras zonas de la ciudad) el enganche al circuito de calefacción con biomasa antes mencionado.
Impulsará junto a TEDER la expansión de este tipo de energía verde en la Merindad, redoblando esfuerzos para que se construya en Estella-Lizarra o alrededores un almacén de acopio y distribución de biomasa obtenida de los aprovechamientos de los pueblos que tengan masa forestal, para su distribución entre aquellos otros que no la tengan y puedan demandarla.
Contratará 3 cuadros de mando con distribuidoras de energía verde estudiando posteriormente los resultados obtenidos para una futura ampliación de cuadros de la ciudad que consuman únicamente dicha energía verde.
Revisará el actual planeamiento urbanístico municipal para adaptarlo a la consecución de estos objetivos (instalación de placas solares en cubiertas, inclusión de criterios bioclimáticos en edificación, uso del espacio urbano para generación de energía, etc).
El Ayuntamiento tiene que velar para recuperar los acuíferos, evitar la contaminación y la sobreexplotación, e impulsar una política de gestión inteligente del territorio que puede incluir ayudas y beneficios fiscales para los proyectos que aborden la regeneración rural y ecológica, la recuperación de los usos agrarios sostenibles y todas las actividades humanas que desarrollen funciones que puedan ayudar a la mitigación del cambio climático.
4. Avanzar hacia una economía local y de proximidad, que impulse la soberanía alimentaria, la silvicultura, la agricultura y la ganadería ecológica y de proximidad para poder lograr lo más pronto posible un suministro agroecológico completo en los servicios alimentarios de titularidad o gestión municipal y propiciar su extensión al resto de la población.

En este sentido, el Ayuntamiento se compromete a garantizar la continuidad ininterrumpida del mercado municipal de productos de proximidad “Plazara!”, su financiación y la atención a sus necesidades, así como a estudiar e implementar otras iniciativas complementarias o paralelas con el mismo objetivo.
5.   Iniciar la adaptación necesaria de los ​recursos municipales para frenar las consecuencias de la crisis climática que ya se pueden observar ​(incremento de la temperatura global, olas de calor, irregularidad de las precipitaciones, aumento del nivel del mar) ​en el contexto de su territorio, fomentando la soberanía energética.
6.   La justicia, la democracia y la transparencia tienen que ser pilares fundamentales de todas las medidas que se apliquen en esta transición. Por lo tanto, hay que establecer mecanismos ciudadanos de toma de decisiones, de carácter vinculante, con competencias en materia de vigilancia, seguimiento y control de las medidas adoptadas.
Así mismo, el establecimiento de estos mecanismos de control y medidas tiene que contemplar una convivencia armónica y respetuosa con los ecosistemas del territorio.
Del mismo modo, la Administración municipal tiene que velar por la revisión y transformación, dentro de sus posibilidades y competencias​, de las actuales relaciones de producción de bienes y servicios, que convierten la vida humana en mercancía y degradan las relaciones humanas.
7.   Por eso habrá que establecer indicadores para que los objetivos sean en todo momento verificables y cuantificables. Se hace necesario garantizar que estos mecanismos sitúen en primer término y ​evitar cualquier tipo de explotación del ser humano por el ser humano, revisando y transformando el sistema actual; así como ​la visión de género y ​la de otros colectivos vulnerables.
8.   ​El Ayuntamiento se compromete a establecer conversaciones directas con la Alianza de Estella-Lizarra por la Emergencia Climática para recibir su asesoramiento y concretar las medidas que se pondrán en práctica ​y a valorar y evaluar el proceso periódicamente para observar los adelantos logrados.
9. El Ayuntamiento de Estella-Lizarra insta al Parlamento de Navarra, a que apruebe con la máxima celeridad posible una Ley de Cambio Climático que haga posible a nivel de la Comunidad Foral Navarra, todo lo declarado en los apartados anteriores a nivel de toda la Comunidad Foral Navarra, y en especial todo lo que exceda del ámbito competencial de este Ayuntamiento y corresponda al ámbito de competencia de la comunidad.
10. El Ayuntamiento de Estella-Lizarra informará mediante un Bando sobre esta moción a la ciudadanía, y remitirá esta moción aprobada al Gobierno de Navarra y al Ministerio español para la Transición Ecológica.

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